En el mundo del fitness y el entrenamiento personal, es común escuchar sobre los beneficios del ejercicio cardiovascular para la salud cardiovascular.
Sin embargo, hay otro tipo de entrenamiento que a menudo se pasa por alto en este aspecto: el entrenamiento de fuerza de alta intensidad, que hacemos en nuestro centro, con nuestras máquinas motorizadas.
En este artículo, exploraremos cómo el entrenamiento de fuerza de alta intensidad adaptativa, puede tener un impacto positivo en el retorno venoso y en la salud en general.
Además, desmitificaremos la idea de que el cardio está exclusivamente relacionado con el corazón y los pulmones, revelando su verdadera esencia a nivel mitocondrial.
El retorno venoso clave en tu protección cardíaca.
Para comprender los beneficios del entrenamiento de fuerza de alta intensidad en el retorno venoso, es esencial conocer su significado y función en nuestro sistema circulatorio.
El retorno venoso se refiere al flujo de sangre desde los capilares hacia el corazón, donde será bombeada nuevamente hacia los pulmones para ser oxigenada.
Es un proceso fundamental para mantener una circulación eficiente y asegurar que nuestros tejidos reciban el oxígeno y los nutrientes necesarios.
Mejora del tono vascular.
El entrenamiento de fuerza de alta intensidad adaptativo, estimula el desarrollo de masa muscular, lo que a su vez contribuye a un aumento del tono vascular.
Esto significa que los vasos sanguíneos se vuelven más fuertes y elásticos, lo que facilita el flujo sanguíneo y el retorno venoso.
Mayor eficiencia cardiaca.
El entrenamiento de fuerza de alta intensidad adaptativa, induce una adaptación en el corazón, aumentando su capacidad de bombear sangre con mayor eficiencia.
Esto implica que el corazón puede manejar un mayor volumen de sangre en cada contracción, lo que mejora el retorno venoso y la circulación en general.
Reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares.
El entrenamiento de fuerza de alta intensidad adaptativa, combinado con una vida activa, un buen descanso, y una alimentación basada principalmente en alimentos no procesados integrales, reduce de forma significativa el riesgo de tener una enfermedad cardiovascular.
La mejora en el retorno venoso y la función cardiovascular en general reduce la presión sobre el corazón y los vasos sanguíneos, lo que disminuye las posibilidades de desarrollar enfermedades como la hipertensión y otras enfermedades del corazón.
El cardio a nivel mitocondrial.
Contrariamente a la creencia común, el cardio no se limita exclusivamente al corazón y los pulmones. Esto viene a decir que la idea del cardio centrismo, está equivocada.
A nivel celular, el cardio ocurre en las mitocondrias, las estructuras responsables de la producción de energía en nuestras células.
Estas estructuras están presentes en mayor número en los músculos esqueléticos, repartidas por todo el cuerpo.
El entrenamiento de fuerza de alta intensidad adaptativa, activa y estimula esas mitocondrias, lo que conduce a un aumento de su capacidad para producir energía.
Esto es esencial para mantener una función cardiovascular óptima y un retorno venoso adecuado.
En resumen, el entrenamiento de fuerza de alta intensidad adaptativa, no solo es beneficioso para mejorar tu fuerza, y masa muscular, sino que también tiene un impacto positivo en tu aparato cardiovascular, sin la necesidad de montar en bicicleta, nadar, correr, o jugar al pádel.
¡Así que no subestimes el poder del entrenamiento de fuerza de alta intensidad adaptativa, y su influencia en el retorno venoso y la salud en general!
¡Empieza a fortalecer tu cuerpo y tu corazón, desde adentro hacia afuera!